Una vela

Se fue la luz.

En las pupilas  dilatadas de los  niños

se refleja  la llama vacilante de la vela

que lanza sobre las paredes

deformadas siluetas fantasmales.

Es una noche de invierno.

Sentados en la camilla

la abuela les narra un cuento

y el miedo los arracima

con las personas mayores.

Preguntan con voz quebrada

sobre qué pasó después.

Ya en la cama sueñan sombras

recobradas a la vida.

Mil enemigos deformes

acuden a su captura

desde el fondo de la noche.

Al sollozo de la angustia

la  madre acude a su lado

para quitarles el miedo

y ahuyentar la pesadilla.

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