El Blog de Juan Francisco Caro
Blog personal de Juan Francisco Caro Pilar, maestro y abogado.
El “ tío de las gomas” traía en el portamaletas de una bicicleta, pirulís, pastillas de goma, y algunas chucherías más. Vendía también “revolanderas” de papel con un palo que nosotros hacíamos volar corriendo por las calles, “restallaeras”, que al frotarlas contra el suelo se encendían y empezaban a chisporrotear. Los más osados se las metían entre las manos moviéndolas como unas maracas. Unas bombas liadas en papel y guita que estallábamos arrojándolas contra la pared y otras que eran pequeños cilindros con una mecha y que a veces, algunos más traviesos, tiraban para que estallaran en los zaguanes de las casas. Cambiaba Tebeos, historias del capitán Trueno, Roberto Alcázar y Pedrín, El Jabato… por otros que no habíamos leído. Cancioneros de Antonio Molina, Manolo Escobar, Manolo “El malagueño”, Rafael Farina, etcétera, etcétera. Todo esto lo colocaba en la bicicleta como si fuera un escaparate y allí acudíamos con nuestra curiosidad y escaso peculio.
Tiempos de penurias y escaseces en que muchas personas lo pasaban mal, pero fueron los que nos tocó vivir, los de nuestra infancia.
Vivimos gracias al azar y a combinaciones aleatorias. Si vemos nuestro árbol genealógico, cualquier cambio en los protagonistas que nos precedieron hubiese alterado a todos los descendientes. Si un tatarabuelo, por ejemplo, en vez de ser Antonio, hubiese sido Pedro, ni nuestros bisabuelos, ni nuestros padres ni nosotros hubiésemos existido. Hubiesen sido otras personas las nacidas. De entre todas las posibilidades de unión, se han ido produciendo unas determinadas y no otras, que también fueron posibles. Por muy lejanos que sean nuestros ancestros todos son parte indispensable para que nosotros estemos aquí. Algunas de esas uniones dependieron probablemente de circunstancias totalmente casuales y fortuitas. Un no te quiero de un tatarabuelo o tatarabuela a su consorte, nos hubiese eliminado de la lista de la vida. Por eso somos el resultado de muchas circunstancias. Por la misma razón, otros podrían haber estado y no están. Una pura casualidad.
Aunque en una entrada anterior publiqué el soneto con el que terminaba mi presentación del libro de la escritora llerenense Tere Montero, hoy la publico integra. El acto tuvo lugar en el salón cultural la Merced de Llerena el día 28 de julio de 2012.
Muchas gracias a todos. Buenas noches.
Nota:. Las fotografías de éste trabajo las he cogido de la web del Ayuntamiento de Llerena y otros lugares de internet. Si algún interesado quiere que las elimine no tiene nada más que comunicármelo. Muchas gracias.
Fotografía de Manuel Rodríguez Espino
http://www.flickr.com/photos/majanublao/