un bostezo gris de lluvia y un toque de oración a la huida de la luz. Es un mes de enagüillas y brasero, de abrigo y de cobijo. Inclinada pendiente de ladera hacia el solsticio de invierno
desde el que se otea a los renos
por un camino de nieve. Es el mes do el rojo no es pasión, sino celaje frío y es también el paisaje sugerido