No ofende el que quiere.

ofensas

¿Qué agravio ha intentado  tu impostura

para herir mi estima con su afrenta?

Fracasan tu cacumen y  tu cuenta

si previste que tienes tanta  altura.

Falta en tu diatriba, compostura

pues  el odio tu mal  estilo alienta

y la envidia malsana lo  sustenta.

Erraste en la intención y  en la mesura.

Lejos de su fin quedó el intento

que más que malestar piedad provoca

y quedas tú a la altura de un jumento

al haber proferido  por tu boca,

quizás por  la escasez de entendimiento,

la estupidez  que a tu sandez revoca.

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