¿Duerme o piensa la abuela?
Entre sombras, alguna vez, suspira.
Ajena y silenciosa, cabecea.
¿Decepción o desengaño
en esa isla de ausencia?
¡Respetable cabeza blanca!
Entre las cosas y ella
ha marcado las distancias
que le enseñó la experiencia.
Refugiada en la ensenada,
a resguardo de las olas,
divisa en calma el ocaso.
Casi a un vuelo de plumas silenciosas.