Crónica rosa.

Ya está aquí el verano y los periodistas  y allegados que viven de crónicas  del puteo y cornamentas consentidas  y de meter las narices donde no les han llamado    empiezan a remover sus posaderas de los asientos  invernales para buscar la noticia o su espejismo en las  aguas de nuestras costas. Nos abofetearán con imágenes de fantoches engominados en veleros de no sé cuantos metros de eslora.  Con el  último modelo de bikini de la  pija niña de papá que ahora luce a su vigésimo novio por los saraos de moda.Con estos  bon vivant no va la crisis. Los ladrones y corruptos se broncean y toman whisky al atardecer en lujosas mansiones veraniegas mientras sus víctimas archivan el tercer aviso de embargo  en la carpeta de las facturas Cualquier imagen o información  de la familia real, empantanada entre yernos y cacerías, vale su peso en papel couché. A la caza pues de la exclusiva y a enseñarles a la plebe mientras come el gazpacho y la tortilla cómo viven los que entienden este negocio de la vida. El paraíso, real o ficticio, a nuestro alcance con sólo apretar un botón o comprar una revista.  

2 respuestas a «Crónica rosa.»

  1. ¡¡¡¡¡¡Genial!!!!!!! Me encanta como escribes. Es un placer leerlo. Así se puede presumir de amigos cultos.

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